Colección Otoño Invierno 2010/11 de Teresa Helbig. Madrid Cibeles FW. Febrero 2010

Pasada la locura de las pasarelas, ahora es tiempo de observar con distancia y tranquilidad algunas colecciones. Teresa Helbig fue la incorporación a la pasarela madrileña del mes de Febrero que quizás más se esperaba. De Barcelona, venía después de hacer mucho ruido: premios en revistas, y en la pasarela 080 (Que nunca fue del todo su sitio). A Madrid llegaba en un año muy dificil lleno de ausencias ruidosas (Castro y Povaguín) y regresos llenos de expectación (Delfín). Llegó con Barcelona rendida a sus pies.

Unos días antes de la pasarela, la visito en su taller de Barcelona, hablamos de la colección y de sus intenciones. Enseña retales y muestras de tejidos: seda, gasa, chiffon… de terminaciones imposibles: Hojas de organza con bordes quemados para crear escamas, recupera el Soutache. Todo se hace en casa, como le gusta a decir.

Inspiración en los años  30, en los clichés de los hermanos Seeberger y en el espíritu que transmiten, en el Art Decó, vuelta a las artes decorativas, a lo externo, a lo epidermico, tan querido en el modernismo de Gaudí… (Modernismo: Barcelona de nuevo)

La sensación de una moda que se hace desde el analisis de la más intímas características de los materiales, empleados en volumenes sencillos, casi con aspecto de envoltura.

Y desde una postura crítica con la modernidad técnica e industrial, Teresa se identifica con los métodos de creción artística y artesanal. Redescubre materiales y técnicas. O se las inventa… o las improvisa.

Hiperfemenina: Es sensual, es epidérmica. Capas y capas superpuestas de manera ligera y envolvente. Capas multiplicadas en las que la piel de la mujer es una capa más de su vestido. La última capa.